Las FARC-EP a través de Pablo Catatumbo, ejemplarizó su argumentación señalando que, de los más de 2.000 presos políticos que hay en Colombia, sólo 125 están penalizados por el delito de rebelión.
De otro lado, el vocero insurgente puntualizo que en este conflicto no se está en un escenario de victoria militar de ninguna de las partes, y, que la mesa de diálogos tiene como objetivo poner fin a esta larga guerra, sin dejar de considerar la necesidad de hacer profundas reformas estructurales a las instituciones del Estado, que implican entre otras, una reforma política y jurídica, que tenga en cuenta las propuestas producidas por la mesa de diálogos y que devuelva a la juridicidad, el delito político con sus conexidades y complejidades. Enfatizó, en el sentido de que esta debe ser “tan amplia en su consideración y alcance, como debe serlo en consecuencia la amnistía general y las medidas de indulto que se deben otorgar en el proceso de paz que Colombia viene adelantando.”
Insistió el comandante Catatumbo, en que son estas sobradas razones para rechazar las decisiones unilaterales que en materia de paz ha venido adelantando el gobierno colombiano sin tener en cuenta la mesa de diálogos como es el llamado “marco jurídico para la paz”, que pretende condicionar el éxito del proceso de paz al encarcelamiento de los jefes guerrilleros, tirando por la borda toda la experiencia internacional en materia de procesos de paz.
- Leer comunicado: Reflexión 4: La rebelión frente a la paz como Derecho Síntesis
URL corto: http://goo.gl/64GPFl